- El culeteo: Es una forma de desplazarse que desarrollan algunos bebés inquietos a los que se sentó de forma muy precoz. Estos, maduraron el tono muscular de la espalda lo suficiente como para mantenerse sentados sin ayuda y con cierta seguridad; aunque nadie les explicó cómo bajar al suelo. Así desarrollan una forma de desplazarse que consiste en avanzar estirando y encogiendo las piernas. aunque este gateo no les permite ejercitar el tono muscular de la misma manera, tan sólo ejercitan los abdominales y un poco las piernas. Nada que ver con la forma de tonificar la espalda, los glúteos, los abdominales y piernas de un gateador.
- El salto del conejo: El niño mueve primero los brazos juntos y después las piernas también juntas.
- Gateo asimétrico: El niño gatea con una rodilla extendida y la otra doblada.
- La marcha del oso: El niño gatea con las piernas extendidas. Se considera una evolución del gateo hacia la puesta en pie.
Dejando a un lado la técnica en el gateo o arrastre que utilice el pequeño, es importante que éste consiga el patrón contra-lateral cruzado, es decir, que mueva el brazo de un lado y la pierna del lado contrario alternativamente en cruz. Es la preparación del patrón de la marca donde se mueve una pierna a la vez que acompaña el movimiento del brazo contrario.